Orfidal, Lorazepam… Frío, frío, no va por ahí.
Melatonina, valeriana… Algo más natural, pero tampoco. Frío helado.
¿Alcohol? Ni lo pienses. No estamos hablando de eso.
Para dormir tranquilo, lo mejor es tener las cosas en orden.
Los corredores de seguros que están ayudando con la DANA (sí, ayudando a todos, sean clientes o no) están marcando la diferencia. Mientras tanto, algunos bancaseguros tienen las líneas colapsadas y otros seguros directos simplemente dan largas. No es de extrañar: no están donde tienen que estar.
Personas ayudando a personas. Así es como debe ser.
Pero, ¿sabes qué están viendo estos corredores? Muchos problemas que se podrían haber evitado con un poco de previsión:
Hogares con seguros que no cubren el mobiliario.
Empresas con valores asegurados insuficientes para reponer maquinaria.
Direcciones incorrectas en las pólizas.
Recibos pendientes de pago.
El resultado: la temida frase "el seguro no me cubre".
Y cuando llega algo como la DANA, el problema se multiplica. Sin un seguro bien hecho, a muchos les espera un camino largo y lleno de complicaciones.
La buena noticia: el seguro funciona, aunque sea lento. Más de 215.000 expedientes ya están abiertos. Pero ojo, tramitar eso no es cuestión de días.
¿Cómo evitar estos problemas?
Déjame revisar tu seguro. Solo necesito los datos de tu hogar y en menos de lo que tardas en preparar un café, te diré el capital mínimo recomendado según tres aseguradoras.
Tú decides si necesitas ajustar algo para estar completamente cubierto. Ni más, ni menos.
Y después de eso, listo. A dormir tranquilo.
Comentarios